martes, 6 de diciembre de 2011

Los Fugger en la política imperial de Carlos V

Esta entrada está dedicada a los Fugger, una familia alemana que pasó a la Historia por ser una de las principales vías de financiación del proyecto político del Emperador Carlos V, además de ser una de las familias precursoras del capitalismo.
Los Fugger comenzaron su actividad empresarial hacia mediados del siglo XV en Alemania, concretamente en la ciudad de Augsburgo, desde donde  empezaron a colaborar con el poder imperial durante el reinado de Federico III.
Años más tarde, empezarán a colaborar también con el archiduque Maximiliano, futuro abuelo de Carlos V. Así, tuvieron que competir con otras importantes familias alemanas como los Gossembrot o los Herwart.
En estos momentos la familia está formada por 3 hermanos, Ulrich, Georg y Jakob, siendo el pequeño de éstos, Jakob, el que dirigirá la empresa familiar. Será Jakob quien consiga hasta el momento el mayor negocio de los Fugger al participar con capital en la elección imperial del nieto de Maximiliano, Carlos I, rey de España. En concreto, los Fugger entregaron la cantidad de 544.000 florines a la causa del joven emperador.
Tras la muerte del líder de la familia, Jakob, asumió la dirección de la empresa el hijo menos de Georg, Anton, que será el que colabore económicamente con el emperador durante todo su mandato.
Pero no sólo colaborará con el Emperador, sino que lo hará con Luis de ante la amenaza turca o con el hermano del Emperador, Fernando. Según recogen las crónicas, con estos personajes mantuvo una relación mucho más cordial que con el Emperador.
Los negocios de los Fugger no se reducían exclusivamente al Emperador, sino que mantuvieron sus actividades económicas en el Imperio, sobre todo en zonas dominadas por los príncipes protestantes, por lo que al estallido de la guerra entre éstos y Carlos V, los Fugger y sus negocios quedaron en una situación muy controvertida.
La monarquía hispánica pagaba sus deudas con los Fugger y con otros banqueros a través de la concesión de diferentes monopolios, destacando el arriendo de los maestrazgos de las diferentes órdenes militares o de las minas de Almadén.
El primer contrato de arriendo de las rentas de maestrazgo entre los Fugger y la Corona se firmó el 28 de febrero de 1524 en Vitoria. Este primer contrato estuvo vigente hasta 1527, cuando pasó a otra importante familia, los Welser, durante varios años.
Fue en 1538 cuando los Fugger recuperaron el arriendo de los maestrazgos, esta vez por una cantidad de 600.000 ducados hasta 1542.
Para llevar a cabo los ingentes negocios bancarios y financieros de los Fugger se crearon diferentes factorías a lo largo del territorio español, destacando por encima de todas la factoría de Sevilla, que controlaba la llegada de materiales preciosos desde América.
El primer trabajador de los Fugger que se estableció en la península fue Wolf Haller, que llegó con Carlos V a Castilla tras la muerte de su abuelo, Fernando el Católico.
Pese al establecimiento de factorías, durante los primeros años los Fugger no contaron con una sede fija en la península sino que seguían al Emperador y a la corte.
El negocio bancario de los Fugger dentro de la Monarquía Hispánica se llevó a cabo aprovechando la red de factorías creadas. Así, la factoria principal de la corte actuaba como banco central, mientras que el resto servían como sucursales de ese banco.
El principal objetivo de este negocio bancario era entregar a Carlos V el dinero solicitado por éste de la manera más rápida y sencilla. Este dinero se podía entregar de tres formas: en primer lugar, el asiento, la forma más importante. En segundo lugar estaba el socorro, forma de adelantamiento sobre una obligación de pago que luego se salda con éste; y, por último, el cambio, un giro de medios de un dominio de Carlos V a otro.
Pero no sólo existía el negocio bancario con la Corona, sino que los Fugger mantenían numerosos negocios con importantes familias alemanas, destacando las ventas de juro, el cobro de juros, el pago de pensiones, los negocios de cambio, los empréstitos y los depósitos como principales actividades.
Por último, para concluir esta entrada me gustaría nombraros dos libros que tratan el tema de los Fugger de manera amplia. En primer lugar está el libro de Ramón Carende, “Carlos V y sus banqueros”, publicado en el año 1977 y que se ha convertido en uno de los clásicos para estudiar la economía durante el reinado del Emperador.
El segundo libro, de fecha más reciente pues se publicó en 1999, es el de Kellenbenz, “Los Fugger en España y Portugal hasta 1560”¸ y se ha convertido también en otro referente para estudiar este apartado de la historia del reinado de Carlos V.

Un saludo. 

2 comentarios:

  1. Esta entrada me parece muy importante para introducirnos en la política económica de Carlos V, centrada en uno de los temas más significativos y estudiados por los historiadores, Los Fugger, además de estudiar los Banqueros de Carlos V, como lo hizo Ramón Carende. Recientemente se ha publicado sus tres tomos antiguos en un solo libro. Muchas gracias por vuestra introducción en el tema. Un saludo!

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  2. Sobre los Fugger en España y Portugal resulta indispensable el libro de H. Kellenbenz ("Los Fugger en España y Portugal"l, Junta de Castilla y León)

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